En Vida Bake elegimos aceite de oliva extra virgen porque creemos que cada ingrediente debe ser un regalo para el cuerpo. Este aceite, extraído en frío de las mejores aceitunas, no solo potencia el sabor de nuestros panes, sino que también aporta salud y vitalidad en cada bocado.
Rico en grasas monoinsaturadas y antioxidantes como el oleocanthal, ayuda a reducir el colesterol LDL (“malo”) y mejorar el HDL (“bueno”).
Sus grasas saludables nutren las neuronas y ayudan a prevenir el deterioro cognitivo con el paso de los años.
Actúa como un potente calmante interno, ayudando a reducir inflamación crónica y mejorar el bienestar general.
Estos compuestos antioxidantes protegen las células del daño y el envejecimiento prematuro.
Favorece una digestión suave y ayuda al cuerpo a absorber mejor las vitaminas liposolubles (A, D, E y K).
Porque creemos que lo sano también puede ser sabroso y abundante. El aceite de oliva extra virgen es una joya mediterránea que aporta suavidad a nuestras masas, prolonga la frescura y transforma cada pan en una experiencia nutritiva y llena de intención.